Llegando
al final del Ciclo Lectivo 2013, el profesor Guillermo Pereira de Educación Ambiental, nos comparte sus observaciones sobre los
procesos que el departamento ha venido realizando durante este año.
Midiendo y controlando
nuestra huella de carbono
A través de nuestra
vida y de nuestras actividades diarias personales o laborales,
generamos residuos que van al ambiente y cuyo impacto podemos medirlo
desde distintos enfoques. Uno de estos enfoques es determinar su
impacto en términos de la emanación de CO2 que representa la
actividad desde su inicio hasta el final de la misma. Así podemos
determinar las emisiones de CO2 por el consumo eléctrico, el de gas,
el transporte y por la generación de residuos. La suma de estas
emisiones por nuestras actividades representa nuestra huella de
carbono o huella ecológica. Esta medición es importante porque el
CO2 es uno de los principales gases de efecto invernadero que ha
provocado el calentamiento global, fenómeno que en la actualidad
causa trastornos severos en el clima y el equilibrio ambiental
mundial.
Al
respecto, nuestro colegio participa de un plan piloto para medir su
huella de carbono a fin de tomar medidas para monitorear esta huella
periódicamente, reducirla y mitigarla con diversas acciones, como el
manejo adecuado de residuos, el consumo racional de la energía, la
reforestación, entre otras, de tal manera que aspiremos a alcanzar
la carbono - neutralidad. De esta forma no sólo mejoraríamos
nuestro desempeño ambiental sino que además aportaremos a la meta
nacional de ser un país Carbono – Neutral para el año 2021.
Hemos
podido determinar una huella institucional equivalente a 3.22
toneladas de CO2 producto de las emisiones de primer y segundo
alcance. Gracias a este proceso estamos mejorando nuestra gestión de
residuos logrando recuperar y manejar adecuadamente el 66 % de
nuestros residuos sólidos orgánicos y sintéticos. También hemos
tomado acciones en materia de eficiencia energética logrando
disminuir en un 33% el consumo de GLP. Además iniciado la medición
del aporte en fijación de CO2 por parte de los árboles de
Sotacaballo (Zygia longifolia) que crecen en nuestro campus, y para
los próximos años este rubro representa un pilar importante hacia
la C- neutralidad. Lo importante en este proceso es iniciar midiendo
el impacto ambiental de nuestras actividades ya que es el primer e
imprescindible paso para mejorar nuestro desempeño ambiental en
nuestro trabajo, en nuestro hogar y en nuestro país.
Sotacaballo ayuda a mitigar nuestra huella |
Reflexionando sobre nuestro recurso Hídrico
Nuestro
pueblo es bendecido, entre otras cosas, por ser irrigado por
múltiples fuentes de agua de las cuales la mayoría de los
pobladores nos sentimos orgullosos y las disfrutamos al consumir agua
de alta calidad y en suficiente cantidad, además del valor
recreativo que las aguas de nuestros ríos también brindan. Sin
embargo nuestras actividades diarias y productivas que conllevan el
uso de este recurso no siempre devuelven a nuestras quebradas y ríos
el mismo bien que nos dan y así por descuido o desconocimiento
descargamos considerables cantidades de materia orgánica, basura,
residuos fecales humanos y pecuarios tanto como aguas servidas a
nuestros ríos.
Todavía hay mucho que hacer |
Gracias
al proceso de monitoreo de la quebrada que bordea nuestro colegio
hemos podido constatar esta problemática, agudizada por el
crecimiento de la población que va sumando impactos negativos a
nuestras aguas superficiales. De esta forma, después de un análisis
microbiológico nos percatamos que dicha quebrada posee cantidades
importantes de coli formes fecales, las cuales lamentablemente acaban
en nuestro hermoso Río Pejibaye. Si bien la quebrada en cuestión no
evidencia aún malos olores, alta turbidez o falta de vida acuática,
debemos reflexionar sobre lo que hacemos con el cauce de nuestras
aguas ya que poco a poco y sin percatarnos podemos afectar tanto la
calidad de estas que nosotros y nuestros hijos no podrán disfrutar,
sin enfermarse, de los días de verano en las refrescantes aguas de
nuestro Río Pejibaye. El que tenga oídos que escuche y por favor,
haga algo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario